Peso en el cual se equilibran los logros obtenidos y el esfuerzo que se debe hacer para seguir bajando.
La persona puede sentirse cómoda en el peso confortable, pero no está en su peso posible, que es más bajo.
No es un estancamiento del peso, sino una detención en el esfuerzo. Alcanzar el peso confortable y descansar allí un pequeño tiempo puede ser una pausa necesaria para iniciar el próximo esfuerzo hacia el peso posible.
De todos modos, tanto el peso posible como el confortable son saludables para quien estuvo gordo.