El cambio de estación puede traer cansancio, somnolencia y falta de concentración. Conocé por qué ocurre y qué podés hacer para recuperar el equilibrio y sentirte con más vitalidad
Con la llegada de la primavera muchas personas experimentan una sensación de fatiga o desgano generalizado, conocida como astenia primaveral. Según la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia, no se trata de una enfermedad, sino de una respuesta natural del cuerpo ante los cambios de luz, temperatura y presión atmosférica.
Durante esta etapa, el reloj interno se desajusta: descienden los niveles de melatonina —la hormona que regula el sueño— y también disminuyen la serotonina y las endorfinas, que influyen en el ánimo y la energía. El resultado puede ser cansancio, somnolencia, falta de apetito y dificultad para concentrarse.
La buena noticia es que este proceso de adaptación suele durar solo una o dos semanas. Si los síntomas se extienden por más de un mes, se recomienda consultar al médico para descartar otras causas.
Mientras tanto, hay hábitos simples que pueden ayudarte a recuperar el equilibrio y la vitalidad:
- 🌙 Dormí bien y respetá tus horarios. Mantener rutinas de descanso ayuda a que el cuerpo regule nuevamente su reloj biológico.
- 🧘♀️ Hacé actividad física. Moverte favorece la producción de endorfinas, mejora el ánimo y la energía.
- 🥗 Comé de manera equilibrada. Sumá frutas, verduras y proteínas de buena calidad.
- 🥑 Incorporá grasas saludables. La palta, los frutos secos, las semillas y el aceite de oliva aportan energía sostenida.
- ☀️ Aprovechá la luz natural. Pasar tiempo al aire libre y exponerte al sol de la mañana contribuye a estabilizar los ritmos circadianos.
Adaptarse a los cambios de estación lleva unos días, pero hacerlo de forma consciente puede mejorar tu bienestar, tu motivación y tu concentración. La primavera puede ser una gran oportunidad para reconectarte con tu energía natural.
Fuente: TN Salud – Cinco propuestas para ganarle a la falta de energía que llega con la primavera






