Cada 7 de septiembre, desde 2020, se conmemora el Día Internacional del Aire limpio por un cielo azul. Con esta celebración, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) busca concientizar a la población acerca de la importancia del aire saludable y hace hincapié en la necesidad de revertir la contaminación atmosférica que causa más de 4.2 millones de muertes prematuras en todo el mundo
La contaminación atmosférica es el mayor riesgo ambiental para la salud humana y una de las principales causas evitables de muertes y enfermedades en todo el mundo.
Se estima que el 92 % de la población mundial está expuesta al aire contaminado, factor que produce aproximadamente de 4.2 millones de muertes prematuras en todo el mundo atribuidas a la contaminación atmosférica en interiores y al aire libre.
En 2016, cerca del 58% de esas muertes prematuras se debieron a cardiopatías isquémicas y accidentes cerebrovasculares, mientras que el 18% fue por enfermedades pulmonares obstructivas crónicas e infecciones respiratorias agudas, y el 6% a cáncer de pulmón. Algunas responden a más de un factor de riesgo.
QUÉ CAUSA LA CONTAMINACIÓN DEL AIRE
A menudo ni siquiera se puede ver, pero la contaminación atmosférica está en todas partes.
Entender los diferentes tipos de contaminación y cómo afectan a nuestra salud y al medio ambiente, ayuda a tomar medidas para mejorar el aire que respiramos.
Nueve de cada diez personas en todo el mundo están expuestas a niveles de contaminación que superan los niveles de seguridad señalados por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
HOGAR
La principal fuente de contaminación en el ambiente doméstico es la quema de combustibles fósiles, madera y otros combustibles de biomasa para cocinar, calentar y encender fuegos.
Alrededor de 3.2 millones de muertes prematuras son causadas por la contaminación del aire interior cada año, la gran mayoría en países en desarrollo.
INDUSTRIA
En muchos países la producción de energía es una fuente importante de contaminación del aire.
Las centrales eléctricas que queman carbón son un emisor importante, mientras que los generadores diesel suponen una preocupación creciente en áreas desconectadas de la red eléctrica.
TRANSPORTE
El sector del transporte mundial representa casi un cuarto de las emisiones de dióxido de carbono relacionadas con la energía, una proporción que está aumentando.
Las emisiones del transporte se han relacionado con casi 400.000 muertes prematuras.
AGRICULTURA Y GANADERÍA
Hay dos fuentes principales de contaminación del aire: el ganado, que produce metano y amoníaco, y la quema de residuos agrícolas.
Alrededor del 24% de todos los gases de efecto invernadero emitidos en todo el mundo provienen de la agricultura, la silvicultura y otros usos del suelo.
RESIDUOS
La quema de residuos a cielo abierto y los desechos orgánicos en los vertederos liberan a la atmósfera dioxinas nocivas, furanos, metano y carbono negro.
A nivel mundial, se estima que 40 % de los residuos se quema al aire libre, un problema que resulta más grave en las regiones que se están urbanizando y en los países en desarrollo.
UN CASO ESPECIAL: LOS INCENDIOS FORESTALES
La ciudad santafecina de Rosario es un claro ejemplo del perjuicio que padecen sus habitantes debido a las quemas en las islas del humedal que separa a esta capital con la vecina, Paraná (Entre Ríos).
El viento arrastra las cenizas y el humo, llevándolos al casco urbano de la ciudad y contaminando el aire a tal punto que los ciudadanos respiran diminutas partículas con un tamaño menor a 2,5 micrones (cada partícula cabe 20 veces en el diámetro de un cabello).
Esas partículas tan pequeñas que ingresan a las vías respiratorias y al torrente sanguíneo se transforman en un peligro para la salud. Provocan estrés respiratorio y representan una amenaza para la salud pulmonar y cardíaca.
El valor de referencia límite para respirar aire sin contaminarse determinado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) es de 15 microgramos por metro cúbico en 24 horas. En Rosario, esos valores son superados 5 veces cuando se producen los incendios forestales.
9 ESTRATEGIAS PARA PRESERVAR LA CALIDAD DEL AIRE
- Usar transporte público o compartir coche.
- Trasladarse en bicicleta o caminar.
- Apagar el motor del coche cuando estés parado.
- Reducir tu consumo de carne y lácteos.
- Compostar alimentos orgánicos.
- Reciclar la basura no orgánica o desecharla de manera separada del resto.
- Al momento de comprar, preferir equipos de calefacción y ventilación «Clase A» o de alta eficiencia.
- Ahorrar energía; apagar las luces y los aparatos electrónicos cuando no los estés utilizando.
- Evitar la quema de basura.
11 CLAVES PARA PROTEGERTE DE LA CONTAMINACIÓN ATMOSFÉRICA
- Evitá el ejercicio intenso ya que incrementa la dosis de contaminantes inhalados.
- Evitá actividades culturales, deportivas y de recreo al aire libre.
- Hidratate continuamente, tomando al menos 2.5 litros de agua al día.
- Evitá el uso de lentes de contacto.
- Consultá al médico en caso de sentir molestias.
- En caso de contar con aire acondicionado, usalo en modo de «recirculación».
- No fumes.
- Si vivís cerca de una zona de incendio, donde el humo sea denso, colocá toallas húmedas en las ranuras de puertas y ventanas.
- Usá mascarilla al salir de tu casa.
- Evitá el contacto de personas y mascotas con las cenizas derivadas de un incendio cercano; si necesitás barrerlas del piso u otras superficies, humedecelas ligeramente y no permitas que se suspendan de nuevo en el aire.
- Evitá la cocción de alimentos con leña o carbón.