Una alimentación rica en calcio, mineral más abundante en nuestro organismo, puede ayudar a quemar más calorías y juega un papel directo en el control del peso. Sin embargo el yogur es mucho más que una excelente fuente de calcio. Te contamos todos los beneficios de este alimento tan completo y nutritivo
El yogur es un derivado lácteo que se obtiene por fermentación de la leche cultivada con la ayuda de fermentos lácticos (Lactobacilo bulgarico y Streptococo termofilo) beneficiosos para la salud.
De sabor ácido agradable y refrescante, el término que designa a este alimento es de origen turco y su origen es mucho más antiguo de lo que imaginás ya que es consumido desde hace al menos 4500 años en Europa Oriental, el Norte de África y desde Asia Central hasta la India, desde donde llegó a América con variedad de nombres y múltiples usos: para consumir solo, diluido en bebidas, mezclado en salsas y usado como ingrediente en sopas, alimentos horneados y dulces.
El Premio Nobel Ilya Metchnikov conectó la longevidad de ciertos grupos de personas en Bulgaria, Rusia, Francia y Estados Unidos con su consumo de leche fermentada, teorizando que la acidificación del tracto digestivo prevenía el crecimiento de bacterias perjudiciales.
A partir de su producción industrial en la década del 20, se innovó en sabores y texturas, volviéndose popular a partir de 1960 con la mejora suiza del sabor (incluyendo frutas) y el desarrollo francés de la versión de crema batida.
Desde entonces, existen diferentes variedades:
•Solos, con frutas, cereales o muesli.
•Enteros, total o parcialmente descremados.
•Fortificados con vitaminas y minerales o sin fortificar.
•Con prebióticos (microorganismos benéficos que fortalecen la flora intestinal y contribuyen a mejorar las defensas).
•Bebibles, firmes o batidos.
YOGUR Y CONTROL DEL PESO
De acuerdo a numerosos estudios, el aumento en el consumo de calcio dietario aumenta la oxidación de las grasas. Es decir: un mayor consumo de alimentos ricos en este mineral activa una hormona denominada calcitriol que, además de fortalecer los huesos, acelera el metabolismo de las grasas favoreciendo el descenso de peso.
Con una ingesta de 1000 mg de calcio por día (el equivalente a dos vasos de leche y un yogur), los adultos podrían controlar mejor su peso si hacen un plan de alimentación equilibrado.
Un estudio de la Universidad de Tennessee (USA) encontró que, en un período de 12 semanas, las personas que redujeron su consumo diario en 500 calorías y comieron 3 porciones de 170 g de yogur por día (aproximadamente 1100 miligramos de calcio) perdieron más peso -un promedio de 6 kilos- que aquellas que solamente recortaron las 500 calorías, no comieron yogur y consumieron la misma cantidad de calcio que el voluntario promedio (500 miligramos).
En comparación, los voluntarios que comieron más lácteos provenientes de yogures descremados perdieron un 22 por ciento más de peso, 61 por ciento más de grasa corporal y 81 por ciento más de grasa abdominal. Además, mientras adelgazaban, retuvieron músculo, clave para la pérdida de peso ya que ayuda a quemar calorías frente al mismo ejercicio que otras personas del mismo sexo y edad, pero con menos masa muscular.
5 BENEFICIOS DEL YOGUR
Por ser un derivado lácteo comparte nutrientes con el grupo al que pertenece.
Los lácteos aportan proteínas completas, hidratos de carbono (lactosa) y grasas. Son la principal fuente de calcio, mineral que junto a la vitamina D es fundamental para formar y mantener huesos y dientes sanos y disminuir el riesgo de osteoporosis e hipertensión.
Su consumo regular tiene acción antiinflamatoria y protectora de la salud cardiovascular, digestiva y visual. También ayuda a prevenir el sobrepeso, la diabetes tipo 2, el cáncer colorrectal y fortalece las defensas.
El yogur posee muy baja proporción de lactosa porque ha sido transformada a ácido láctico. Por esta razón, es un alimento ideal para personas intolerantes a este hidrato de carbono presente en la leche.
Además de favorecer el descenso de peso, es importante saber que el consumo regular de yogur…
- Fortalece los huesos y previene la osteoporosis. La ingesta de yogur favorece la asimilación de calcio y promueve la adecuada mineralización de los huesos, tanto durante la niñez y la pubertad (período en que el esqueleto acumula el 45 por ciento de su masa mineral) como en las demás etapas de la vida. La mejor forma de prevenir la osteoporosis es mediante una adecuada ingesta de calcio en todas las etapas de la vida. Para lograrlo, el consumo regular de yogur resulta ideal porque permite preservar la integridad y la densidad mineral ósea.
- Tiene acción probiótica. Como aporta y facilita la presencia de bacterias saludables, equilibra la flora intestinal y contribuye al buen funcionamiento del aparato digestivo.
- Mejora la absorción del calcio. Un pote de yogur aporta entre el 25 y el 40 por ciento del requerimiento diario de este mineral y posee 150 mg más de calcio por porción que la leche.
- Favorece la digestión de la lactosa. Pese a los beneficios de la leche, a menudo los adultos dejan de consumirla debido a la dificultad de digerir la lactosa, una forma de azúcar que estimula la absorción de calcio y otros minerales. El yogur posee entre 20 y 30 por ciento menos lactosa que la leche, y contiene enzimas que colaboran con la digestión de dicha sustancia.
- Ayuda a controlar la presión arterial. Una alimentación rica en lácteos descremados, yogur y vegetales disminuye el colesterol y contribuye a controlar la hipertensión.
A pesar de todos los beneficios, el 97 % de los hogares argentinos no alcanza la recomendación diaria de lácteos. De hecho, el consumo promedio de leche es del solo 70 ml por día, lo que equivale a menos de medio vaso.
CÓMO CONSUMIRLO
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